La Aduana fue inicialmente la denominada Casa Requena, una espaciosa casa pensada para ubicar diversas dependencias relacionadas con la obra del proyectado canal de navegación entre Reus y Salou. Una vez desestimado definitivamente este proyecto, fue la sede de la Real Aduana Nacional, anteriormente situada en la actual calle de Ponent. El edificio de la Capitanía Marítima, siempre fue un equipamiento portuario. Acogió también las dependencias de Sanidad Marítima.
Originariamente tenía adosada una fuente y un abrevadero para las caballerías. Los edificios de la Aduana y de la Capitanía fueron construidos alrededor de 1820, justo cuando la decadencia del Puerto de Salou era ya irreversible. Ambos edificios fueron desamortizados a principios del pasado siglo XX y pasaron a manos privadas. La Capitanía conserva gran parte de su aspecto original, aunque ha sufrido varias intervenciones. Antes sólo tenía una planta baja y un piso en la parte que mira al Paseo Miramar, donde había un abrevadero para las caballerías y una fuente.