Batea. Sant Joan d'Algars Pinyeres y poblado ibérico del Tossal del Moro

 Batea, surcado por barrancos estrechos y paralelos, los cuales hacen hacia diferentes valles, Voravall y valle Mayor entre otros, y el río Algars, a poniente, marca el límite con las tierras de Aragón. Desde Gandesa se llega a través de la N-420 y la C-221 (12 km). La villa tiene un origen protohistórico; en sus alrededores, se han encontrado restos de diversas culturas y pueblos, Coll del Moro del borrascas y collado del Moro de Pinyeres. Se menciona Batea por primera vez el año 1153, cuando Ramón Berenguer IV hizo donación de estas tierras a los templarios de Miravet. En 1181 recibió dos cartas de población, otorgadas por el rey Alfonso el Casto. La autoridad de aquel lugar quedó en manos del caballero Bernat Granell, y pasó posteriormente a la Orden del Temple. En 1317, los hospitalarios heredaron este sector junto con Pinyeres y Algars, dentro de la Castellanía de Amposta. Durante el s. XV la villa tuvo que soportar las agresiones de las tropas fieles al rey Juan II, que, después de fuertes luchas, acabaron incendiando la población. El núcleo antiguo de Batea es el más característico de la Terra Alta. Conserva gran número de porches, cubiertos y construcciones de sillar de época medieval, la calle Mayor, todo porticado, es del s. XIV, la capilla de la Virgen del Portal es de estilo barroco, del siglo XVII. La iglesia de San Miguel, barroca-neoclásica, construida en el s. XVIII por Francisco Melet. Antiguamente, en este lugar, estaba el castillo y la iglesia gótica, actualmente, pero, sólo se conserva el Fossar. El núcleo antiguo de Batea estuvo amurallado hasta el s. XIX. Hoy todavía podemos ver algunas de las puertas de entrada como el portal del Ángel, el portal de cal Largo y el portal de San Roque. Construcciones interesantes son Casa Catalán, los porches de las calles San Miguel, Centro y Caballeros, la Torre Martí y la Torre del Español, elementos defensivos en las vías de comunicación entre Cataluña y Aragón. Podemos hacer un agradable paseo por el Calvario, que consta de seis capillas barrocas de los s. XVII y XVIII. Salimos del pueblo por la ctra. C-221 en dirección a Maella. 10 km después, 250 metros antes de la Venta de Algars, dejamos la carretera y tomamos un camino a mano izquierda que nos llevará a los pies del Castillo (1,4 km), antiguamente lugar militar y estratégico, ya que el río de Algars hacía de frontera natural con los sarracenos. Más abajo de los restos del castillo gótico se conserva la iglesia de San Juan de Algars, construida en el s. XIII, románica de transición y modificada posteriormente. Para ir al poblado ibérico del Tossal del Moro ya Pinyeres, volvemos a la carretera, la seguimos en dirección a Maella y, pasada la Venta de Algars, seguimos un camino de tierra a mano derecha que nos conduce a Pinyeres (2,8 km de pista). La iglesia de la Transfiguración del Señor, románica de transición, conserva una pila bautismal de inmersión. Al sur de las casas de Pinyeres, y encima de una colina, se localiza el poblado ibérico del Tossal del Moro, ocupado desde el s. VII hasta el IV a. de C. Lugares emblemáticos Poblado ibérico del Tossal del Moro Castillo e iglesia de San Juan de Algars Iglesia de la Transfiguración del Señor Pinyeres El Calvario Torre del Español Torre Martí Casa Catalán Portal de San Roque Portal de cal Largo Portal de l'Àngel Comarcas: Terra Alta Distancia: 28.4 km Señalización: Sí Duración: 2 h Temas: Naturaleza | Cultura     Ver restaurantes aqui Ver hoteles aqui Criterios de uso de las rutas Fuente: Generalitat de Catalunya. Dirección General de Turismo / Dato de actualización: 30/11/2002    

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